miércoles, mayo 25, 2005

Aire fresco

Hoy como nunca deseo hablar de mi, es raro pero he comprendido poco a poco que la llegada de este medio (el blog), me ha servido para descargar muchas situaciones, que en el entendido de tener los oídos pertinentes no habría resultado tan fácil ni tan cómodo. He escrito de todo, de lo que veo, en muchas ocasiones de lo vivido, pero por sobre todo he intentado (en ocasiones con mucho trastabillar) dejar algo que es mucho más personal, mis percepciones, mis sentimientos, mas aún he dejado la huella cada vez que he comprendido lo que no he sido, y acá deseo detenerme, pues si bien reconozco mis propios valores y fortalezas, y aún más mis debilidades constantes, no he sido capaz de llegar a creer en que existen momentos en la vida, en donde lo mejor (y parafraseando a Mafalda) es pedir que paren el mundo que me quiero bajar , y hoy es eso lo que he decido, parar, tener la pausa y la visión de conjunto que no he logrado tener, pero por sobre todo sentirme cómodo y sano, se que es un tanto complejo (conociendo mis flaquezas del alma) pero es un propósito, no es un plan de trabajo, no existe Carta Gant de por medio, sólo existe mi voluntad de estar bien...para quién sepa ver con los ojos adecuados esta limpieza...y para respirar el aire que siento me puede refrescar la cara y las manos...
Nuboso un 25 de mayo, día de muchas “santas”.

jueves, mayo 19, 2005

Valparaíso post / lluvia

Hoy existe un brillo especial en este puerto de Valparaíso, no tengo claro si es la secuela posterior a la lluvia, como dice mi amigo Ernesto, o por qué simplemente ella lavo la cara a esta ciudad. Valparaíso es un espectáculo con lluvia, sus calles están distribuidas de tal manera que el agua corre en dirección (obvia) hacia el mar, ahí se ven los caudales y se ven grandes tomas de aguas, pero lo que más impresiona es la fuerza que toma ese trayecto, en ocasiones me ha tocado ver verdaderas cascadas caer desde los cerros, pero algo si es evidente, la fuerza la da el desnivel y el tipo de las calles, algunas aún de adoquines y otras simplemente de asfalto liso. Las escaleras de esta ciudad adquieren una belleza única al ser una cascada sonora, ninguno de estos elementos deja al simple peatón impávido, o por el hecho de que se moja o por la belleza de la naturaleza.
Todo adquiere un rostro nuevo con el brillo incesante del sol, de la misma manera la gente sale a las calles con la disposición de quién sale de un encierro, por que algo si debemos reconocer, Valparaíso con lluvias como las de ayer se transforma en una ciudad lenta y dormida, no es para menos si todo quiere llegar al mar....
Luminoso día 19 del mes de mayo..

miércoles, mayo 18, 2005

Hoy un recuerdo

Hoy hace un mes que no cuento en carne a mi abuelo, hoy hace un mes que las cosas pasaron a ser del ámbito de los recuerdos, si alguien me dice lo has superado tiendo a decir que si, pero en el fondo le doy más lecturas, no sólo es el valor y el gesto de lo que se vive sino más bien de lo aprendido, de ahí que hoy al ver el día con lluvia no pueda evitar recordar las tostadas con mantequilla y el té fuerte que le gustaba a él. Hoy como ayer y seguro como mañana te recuerdo viejito lindo.

Un 18 de mes después.

lunes, mayo 16, 2005

El asombro

Hace un rato atrás leía como con ojos propios un correo enviado por un amigo / poeta, en el se planteaba esto que nos ocurre a mucho que tenemos hijos pequeños, que es tan simple como comenzar a descubrir de nuevo el mundo, pues hay algo evidente, mientras más vivimos más complejo hacemos el análisis de lo que transcurre, sin ir más lejos este fin de semana me di cuenta de lo perceptivo que son los niños, y de cómo hoy ellos no son como fui yo en la infancia, existe un bombardeo constante de imágenes sonidos y cuanta tecnología este a su alcance, que hace por ejemplo que un niño de cuatro años sepa perfectamente manejarse con celulares y juegos interactivos, cosa que se hace casi cavernícola si pienso que yo jugaba con el pong y el Atari como gran cosa, y ahora este personaje le pide a su tata una consola de PlayStation (espero que la uno), bueno el tiempo pasa dice la canción, pero duele reconocerlo. De la misma manera que veo esos detalles, reconozco otros más variopintos, como eso de leerme la Revista Claridad (publicación chilena de comienzos del siglo XX) para poder rastrear ahí a un poeta nacional, o caminar por la extensión completa de Providencia (no se si ya se llamaba 11 de septiembre) para arreglar el mundo, o ir a un boliche en la trastienda del actual Hotel Plaza San Francisco Kempinski, pero bueno eso y más son los recuerdos de esos que nos alimentamos para lograr tener la ingenuidad de lo pasado. Las consolas ya no poseen botones de goma, ni las pantallas de los computadores son verdes, pero algo si es seguro las cosas son algo más que simples huellas en el aire, y en todas ellas siempre hay una buena cuota de asombro.
Valpo son sol, un 16 de mayo.

miércoles, mayo 11, 2005

El agua y el miedo

Como es la costumbre ante lo desconocido uno tiende a tener un miedo no entendible, como es por ejemplo mis pequeñas fobias, bueno si soy sincero son algo más que simples mañas, por qué los que me conocen saben que por nada del mundo me subo a un aparato que flote sobre agua, el mar, los ríos de este largo país se han perdido el privilegio de transportarme, por qué ni yo se cuando comenzó mi miedo al agua, me declaro bueno nadando pero el sentir flotar el cuerpo sobre un objeto es mucho más de lo que mis neuronas pueden soportar. Que curioso es este dato, en mi viaje a España, cuando viaje a la Universidad de Salamanca, mi mayor preocupación fue el saber que el avión volaría por más de 9 horas sobre el Atlántico, es decir, agua, pura agua salada allá abajo, eso debo reconocer me quito el sueño, incluso por esas cosas dignas de lo no explicable viajaba en Business y nada, todo era igual, el miedo pudo contra el sueño y la llegada a Barajas fue casi mágica, nunca había sentido tanto placer de pisar el suelo. Cuento todo esto por qué hoy comprendo que cada día me acerco más al agua, de camino a la oficina veo el mar, con grande o pequeñas olas, pero ahí esta desafiándome... se que llegará el día que me vea mirando el puerto de Valparaíso desde el mar, por ahora esperaré.
Un día nubloso de mayo.

lunes, mayo 09, 2005

Foto

Como recorriendo un pasado ajeno
los pies se elevan ante el suelo,
nada es fácil si el bolsillo lleva su foto,
nada es fácil si la voz se arruga con
las primeras letras de su nombre, pero
al fin de que hablamos si siempre estuvo.

Pudo estar acá o allá pero de alguna
forma especial su eco se vio desgastado
entre el tronar de mil corazones, sus mil
rostros se hicieron uno sólo, hoy lo que
queda no son más que grietas en una
imagen en blanco y negro.

El pasado nos cala entre los dientes, cada
vez que sacamos la foto del velador, y ahí
radica el encanto de beber del sudor del alma,
nadie ni nada nos puede detener ahora,
solos, sin sombras ni ecos, sólo con la huella
de un rostro.

El espejo nos conversa más que nunca hoy.

(ante una imagén de mil pasados)

Paseo

El Museo Militar en Santiago me deparó buenas experiencias, el sábado lo recorrí con mi hijo y de verdad se deja admirar uno por la aplicación de tecnología, por lo pronto cada sala temática posee una ambientación sonora y junto a ello las caracterizaciones de los personajes (todos soldados obviamente) esta de muy buen nivel, los ojos de Ale no dejaron de brillar al ver las armas, los uniformes y cuanta cosa guarda esta “caja de Pandora”, que raro es eso, pues de verdad nunca he estado muy entusiasmado por ese mundo de ordenes y punta y codos, pero los niños poseen la magia suficiente para no ver más que entretención. El paseo siguió luego por la Plaza de Armas y la Catedral, cada sitio era un nuevo descubrimiento, y ahí estábamos los dos rodeados de peruanos, chilenos, gringos y cuanto espécimen llega a esos lugares viendo un desfile de Tirana, y ahí estaba yo viéndome cuando tenia cuatro años como mi hijo de la mano de mi abuelo ( o de mi papá), uno inevitablemente repite patrones de aprendizaje, la diferencia es que uno igual desea aprender de nuevo de esos lugares y de su gente.
Lunes, comienzo de semana

jueves, mayo 05, 2005

Sorpresa

Las sorpresas son la mejor manera de matar malas horas, ayer por la tarde descubrí que cuatro minutos de teléfono pueden borrar perfectamente días y horas de dudas y dolor, como si todo se anunciará me quede más tarde en la oficina, no había panorama de tal forma que el ring tone del celular (con la música de feel de R. Williams) me hizo saltar, ahí estaba la voz esperada, ahí estaba la señal que las cosas suceden pero sus muertes son un anuncio de reasignación (un creyente fervoroso diría acá resurrección), en pocas líneas respire, respire por saber que incluso en el extremo del sentir uno sabe que ha hecho lo correcto, y eso se refleja en el recuerdo... sano no sano, ni idea, sólo esta claro que la sorpresa mato el silencio y eso es mucho decir. Hoy la calma se apodera de las manos, pero no hay segundos de duda, la cosa es clara... no mentirle al rostro que veo tras el espejo... él sabe y ella también lo sabe.
(Sol otoñal en un 5 del 5 del 05 )

miércoles, mayo 04, 2005

Volver con el pasado

Que cosas de la vida, hace un rato me puse a pensar en todas aquellas situaciones en donde he estado con algún indicio del pasado, de alguna manera el pasado se hace un presente continuo, los ex compañeros de la universidad o están en los bares a los que acudo, o están en las revistas que leo; de alguna extraña coincidencia muchos nombres han comenzado a parecer, desde ver en una botillería el clásico flor de Maipo a ver o frecuentar de nuevo el Parrón , a ver las películas del pasado del ‘formador’ cine en su casa del canal 13, hasta volver a las carreras de caballos y al cerro Santa Lucía. En fin no estoy siendo nostálgico sino que por el contrario estoy aprendiendo a verme, saber a ciencia cierta de donde salió este personaje, que se construye desde ahí, raíces, mística o como quieran llamarlo. A si uno percibe que nunca ha estado sólo, como alguna vez quise creer de boca de una musa oriental, esa que no deja de estar presente, pues no es ni será pasado...
(Valpo con penumbra)

martes, mayo 03, 2005

Carreras y vida

36 años pueden ser una buena cifra de acontecimientos, unos más otros menos han hecho de mi una persona llena de historias, de ellas hoy concibo en general las que me han forjado el espíritu y el alma, pero por sobre todo estoy comprendiendo que cada situación en si e suna vivencia que debe ser valorada. Como pensar en las cosas bellas y simples que me provocó estar este domingo en el Club Hípico de Santiago, junto a mis hijos fuimos descubriendo el mundo que mi abuelo me entregó, de alguna forma estaba haciendo lo mismo que hace unos treinta años había hecho él conmigo, los niños disfrutaron tanto más la Troya con el desfile de caballos, el ir y venir de la gente, el murmullo del dato (clásica coincidencia de azar y suerte que eleva a algunos como héroes y a otros como villanos), pero por sobre todo el sonido de la trompeta al anunciar que la carrera esta por partir, vi en los pequeños ojos de mis niños la ansiedad de lo desconocido, pero de igual forma me vi yo esperando con las manos apretadas el paso raudo del tropel de caballos, batallando con la meta y haciendo que el pasto fuera un simple reflejo de las patas al saltar. Este domingo descubrí junto a ellos que mis historias no les son ajenas, y mejor que eso descubrí que aún sintiendo el alma apretada y adolorida puedo transmitir alegría a la gente... los mundos se descubren en cada rincón, y entre los ojos infantiles la magia se hace ante un simple chasquido de fusta...
Un 3 de mayo de 2005 (con nubes y agua)