lunes, agosto 23, 2004

Belleza pura

Eso de que las calles de Bs. Aires tienen ese no se que, es una verdad compleja de asumir, las facturas y las medias lunas con leche te saltan a los ojos en cada esquina, pero por sobre todo esta el concepto distinto de la belleza, las mujeres poseen el encanto del cuerpo y la mirada seductora, es como una permanente pasarela, pero acá nace lo curioso; sin estar en un estado de ceguera por belleza, es posible descubrir la belleza de las mujeres que uno conoce y que no ha tenido ni el animo ni el tiempo de describir, hoy por ejemplo al caminar por la Calle Lavalle con Florida (pleno microcentro de Bs. Aires) me di cuenta que debo valorar la seducción de las musas de mi tierra, se que no es la compleja belleza de los griegos, ni el desenfado de la tradición francesa, ni el sentido libre de las americanas, pero tiene algo que me hace transpirar las manos en este teclado, una mirada sincera y profunda, los ojos orientales me llenan la vida de ese aire que ni siquiera esta ciudad cosmopolita me puede dar, gracias por mirar con el alma a las musas del pleamar chileno, a esas que el brillo de una sonrisa casi perfecta le dan un sentido distinto a las cosas y a mi entorno. El Tavelli de Santiago tiene un espejo en donde se que esos ojos se han mirado en más de una ocasión.