viernes, agosto 13, 2004

Las musas

Los griegos usaron a las musas como una fuente permanente de inspiración, en ellas se permitia ver la luz de la creación, la fuente originaria de la idea artística y el tronco desde el cual se despliega lo nuevo o lo transformado. Hoy en día la poesía es la depositaria (por la exposición) de esta figura, pero ¿no será posible verlas en otras situaciones?, yo pienso que si, el canto hoy no es al Olimpo, ni a las otras ninfas, ya no son sólo las partes en la búsqueda de la verdad en los prólogos poéticos, hoy son las que desencadenan vida, son las silenciosas mujeres que llegan sin esperarlas, que con mezclas de miradas orientales y sonrisas deslumbrantes, nos dejan el alma en hilos, hoy las musas son motores, son acciones, la poesía las podrá transformar en seres inalcanzables, pero la vida nos las deja dando vueltas como un carrusel de mil colores. La musa de hoy no tiene nombre, pero llena de vida, es la del lado, la del frente o la de más allá, es la que nos mira dentro y nos dice "estoy aquí", esa musa es mil veces más potente que la silenciosa de papel, es la idea de lo esperado y soñado, es el refugio ante el desconcierto, pero por sobre los ojos y el alma es real, y descansa en los pleamares del océano.