viernes, julio 22, 2005

¿Qué hueles con el recuerdo?

Alguien por ahí me dio algunos indicios hoy de lo que puede provocar la memoria, es claro que existen recuerdos que bien pueden ingresar en la categoría de malditos, pero también los hay de aquellos que incluso nos traen no sólo el escenario, sino todo lo que se generó en ellos; la luz, el espacio, y por supuesto los aromas, si por qué algo es evidente cada palabra bien puede ser transformada en una secuencia lógica (o ilógica) de químicos que se unen en un abrazo, y luego se confunden en ese paisaje que sostiene la mirada: el Forestal, las calles del centro de Santiago, los barrios de Maipú en los ’80, el Bustamante, y un cuanto hay de paisajes. En ellos están los aroma del ayer y las ilusiones de hoy, por eso el recordar es un acto gratis para el alma, pero un complejo proceso para las neuronas.

(sobre el aroma de la tierra húmeda vista en miel)